miércoles, 4 de marzo de 2009

RODOLFO EL CARACOL DE MI NENE...



Esta es la historia de Rodolfo el caracol, mi nene tendría unos 7 años y no se le ocurrió otra cosa que coger como mascota un caracol que un día mi madre le trajo de la riera del lado de mi casa (el pobre no venía de un sitio muy glamuroso que digamos) El caso es que mi nene hizo que le comprara una pecera de plástico de esas de Tortugas pequeñas (florida) y así lo hice .Le metía lechuga a mi me daba mucho asco ver al bichito babosin todo el día soltando eso que ahora esta tan cotizado y va tan bien para la piel de algunas mujeres :) yo le decía:

- Toni, no tienes bastante con los gatos y el agapornis? Y el respondía:
-No porque este es mi mascota, al pobre caracol lo tenía martirizado no os habéis fijado que todos hacemos lo mismo ante un caracol le damos un toque en las antenas para que las escondan. Aynsss a ti te gustaría que te metieran el dedo en un ojo y esperaran que lo cerrases .En fin, supongo que es una costumbre como otra cualquiera.
Una mañana de lluvia decidí que ya era hora de que Rodolfo se fuera de casa y le dije a mi nene, que era mejor que se marchara al campo y así conocería a una caracola y serian felices! (lo típico) Y aunque me costó un poco convencerlo , me dijo que bueno pero que lo teníamos que dejar en un buen sitio. Mi nene no se conformaba con cualquier cosa, así que me hizo cruzar toda una riera y buscar un trocito de campo para así soltarlo. Me hizo despedirme del caracol y le deseemos un feliz viaje, el pobre acabaría en la olla de alguna persona. Puesto que ese día llovía y ya había visto algún señor con bolsa y botas (que triste final). 
Muchas veces me decía mi nene -que estará haciendo Rodolfo? y yo le respondía: -seguro que ya tiene familia y pensaba (mira que si se me presentan él, su pareja y los caracolitos, ya seria ¡la leche! ) :)
No os creáis que la cosa acabo así, me hizo que le comprara una peli de Disney, que le gustaba y unos sobres de Pokémon (para equilibrar el cambio más que nada) En fin, lo que no hagamos por nuestros hijos...